miércoles, 23 de diciembre de 2009

mujeres

















Mujeres -Manuel Vilas-
No las ves que están agotadas, que no se tienen en pie, que son ellas las que sostienen cualquier ciudad, todas las ciudades. Con el matrimonio, con la maternidad, con la viudedad, con los golpes, ellas cargan con este mundo, con este sábado por la noche donde ríen un poco frente a un vaso de vino blanco y unas olivas. Cargan con maridos infumables, con novios intratables, con padres en coma, con hijos suspendidos. Fuman más que los hombres. Tienen cánceres de pulmón, enferman, y tienen que estar guapas. Se ponen cremas, son una tiranía las cremas. Perfumes y medias y bragas finas y peinados y maquillajes y zapatos que torturan. Pero envejecen. No dejan las mujeres tras de sí nada, hijos, como mucho, hijos que no se acuerdan de sus madres. Nadie se acuerda de las mujeres. La verdad es que no sabemos nada de ellas. Las veo a veces en las calles, en las tiendas, sonriendo. Esperan a sus hijos a la salida del colegio. Trabajan en todas partes. Amas de casa encerradas en cocinas que dan a patios de luces. Sonríen las mujeres, como si la vida fuese buena. En muchos países las lapidan. En otros las violan. En el nuestro las maltratan hasta morir. Trabajan fuera de casa, y trabajan en casa, y trabajan en las pescaderías o en las fábricas o en las panaderías o en los bares o en los bingos. No sabemos en qué piensan cuando mueren a manos de los hombres.


1. Una reflexión sobre el escrito
2. Una pequeña bio sobre el autor
3. Si la mandas antes de reyes será buena señal
4. Intenta averiguar quien canta (en el video que enlazo al final) y algo de la vida de esta mujer grande, grande, grande

grande, grande, grande el video

Con te dovrò combattere,
non ti si può pigliare come sei
i tuoi difetti son talmente tanti
che nemmeno tu li sai
sei peggio di un bambino capriccioso,
la vuoi sempre vinta tu,
sei l’uomo più egoista e prepotente
che abbia conosciuto mai.

Ma c’è di buono che al momento giusto
tu sai diventare un’altro,
in un attimo tu
sei grande, grande, grande
le mie pene non me le ricordo più.

Io vedo tutte quante le mie amiche
son tranquille più di me,
non devono discutere ogni cosa
come tu fai fare a me.
Ricevono regali e rose rosse
per il loro compleanno,
dicon sempre di si
non hanno mai problemi e son convinte
che la vita è tutta lì.

Invece no, invece no
la vita è quella che tu dai a me,
in guerra tutti giorni sono viva
sono come piace a te.

Ti odio poi ti amo poi ti amo poi ti odio poi ti amo,
non lasciarmi mai più
sei grande, grande, grande
come te sei grande solamente tu.

Ti odio poi ti amo poi ti amo poi ti odio poi ti amo,
non lasciarmi mai più
sei grande, grande, grande
come te sei grande solamente tu.

Non lasciarmi mai più
sei grande, grande, grande
come te sei grande solamente tu

No hay comentarios:

Publicar un comentario